viernes, 11 de noviembre de 2011

El Homo Sapiens Sapiens Versión 20-20.

El Cavernícola que todos llevamos por dentro.
El ser humano vive en este siglo XXI uno de los retos más trascendentales de su historia, después de la gran extinción ocurrida hace aproximadamente 70.000 años, de la que lograron sobrevivir unos cuanto miles de Homo Sapiens (se estima que quedaron un máximo de 10.000 personas, de una población que debía estar muy cerca al millón de habitantes), cuando se sostiene que ocurrió la erupción del volcán Toba, en la isla de Sumatra, que resultó en varios días de oscuridad y que alteró las temperaturas del planeta de manera significativa (6 a 7 años de invierno volcánico). 

Hoy tenemos que enfrentar una amenaza que puede llevarnos a la extinción nuevamente,  por causa de una tragedia similar, la contaminación ambiental, el calentamiento global, la guerra  nuclear o porque no seamos capaces de adaptarnos a las nuevas realidades que nos van a tocar vivir en el siglo XXI; hay quienes sostienen que estamos en los albores de una nueva era.

En oportunidades anteriores he señalado que el ser humano ha sido clasificado como una especie generalista, que tiene una capacidad innata de adaptación a medios ambientes o ecosistemas diferentes y también a cambios importantes en su medio ambiente habitual.

Del millón de años de edad, que se le atribuyen a la especie humana, transcurrieron 960.000, aproximadamente, en que vivimos una existencia más parecida a la de nuestros parientes mamíferos;  sólo tenemos 40.000 caminando a paso mas rápido hasta el hombre moderno, y de estos, menos de 200 años, en que hemos desarrollado un alto crecimiento tecnológico. Por primera vez en la historia, con serias posibilidades de producir nuestra propia extinción.

En 40.000 años hemos avanzado demasiado, pero aún hoy tenemos muchos rasgos y actitudes de ese ser primitivo que está rondando muy cerca de nosotros y cada vez la velocidad de avance es mas acelerada. ¿Hasta cuando podremos aguantar esta dinámica exponencial de cambio y adaptación?.

Asumo que el acelerado cambio que hemos tenido en las últimas décadas tiene que ver mucho con la mayor  y más veloz comunicación entre los seres humanos, sin importar su lejanía ni la diferencia de idiomas, puesto que cada vez hay más personas que usan un segundo idioma en su comunicación, sin contar la proliferación de traducciones de textos y el doblaje o subtitulado de películas y programas de televisión, que hace asequible, a un número creciente de personas, toda clase de información, sumado a la versatilidad y velocidad de la comunicación por satélites, televisión, teléfono, internet,  etc..
Albert Einstein: "La locura es:
Hacer lo 
mismo y esperar un resultado diferente
"

A lo largo de la historia han surgido personajes de una inteligencia superior, pero cuando en algunas sociedades esos genios conviven en ambientes en que existen grupos de intelectuales, pensadores o científicos de alto nivel, la discusión inteligente y enriquecedora, la competencia entre estas personas, donde se valora este patrimonio social y se estimula su desarrollo, sea por los Estados o las Universidades y se logra la sustentabilidad de esta actividad creadora, se produce una explosión de genialidad como la que ocurrió en la Alemania en la primera parte del siglo XX antes del advenimiento del Nacional Socialismo. Me percaté de este fenómeno cuando leí el libro llamado “En busca de Klingsor” de  Jorge Volpi. En este libro que pudiera ser calificado de historia fabulada, muestra el autor, todos los grandes genios de esa época que destacaron en la física, la química y la matemáticas y todos lo Premios Nobel que fueron otorgados a ese país.

 En ese estado de cosas se hace posible lo que expresó en una oportunidad Isaac Newton, en una carta remitida el 15 de febrero de 1676 (del calendario juliano) a Robert Hooke en la que parafraseando a Bernardo de Chartres, dijo: “Si he visto más lejos es porque estoy sentado sobre los hombros de gigantes” (la frase de Chartres fue: “unos pigmeos subidos a los hombros de unos gigantes verán más lejos que los gigantes mismos”).

Creo que ambas frases aplican a lo que quiero expresar, porque en esos ambientes tan enriquecedores, los genios destacan sobremanera y los nos tan genios pueden alcanzar niveles muy elevados de creación.
Ahora la comunidad científica o intelectual en cualquier disciplina no requiere estar tan cerca, porque las comunicaciones mundiales permiten que una persona estudiosa disponga de información clave y pertinente de cualquier disciplina, prácticamente en tiempo real; saber quien trabaja en su campo, que investigaciones realiza (a veces se guarda esta información para evitar que otro se adelante a un descubrimiento) los trabajos publicados por las instituciones universitarias y de investigación, las discusiones en congresos y foros internacionales, etc.

Pienso que no podemos imaginar la magnitud de la explosión creativa en el mundo de hoy y más aún cuando a gran velocidad cualquier nueva creación se convierte en una realidad visible y masiva en todo el planeta. Hoy cada vez más personas conocen de la existencia de avances tecnológicos y demandan poder beneficiarce de los mismos.

Homo Sapiens Ver. 20-20
Ayer en mi clase en la universidad le decía a mis alumnos que en el 2020 yo no me imaginaba dando clases magistrales en un aula; posiblemente las clases serán grabadas en videos que cada alumno podrá ver desde su casa, sin trasladarse a la Universidad, que las preguntas y consultas al profesor podrán ser respondidas en ambientes de chat o skipe de la misma forma y que la evaluación será presentada por el alumno en su propia computadora, además de que no existirá material impreso de estudio, sino exclusivamente digital (escrito y oral, posiblemente más parecido a una producción de televisión, con imágenes, tablas intercaladas, etc.).

Esto me lleva a concluir, que la educación que hoy se imparte en el mundo no está formando personas que puedan ser exitosas en el 2020.

La concepción de carrera profesional se está desdibujando de tal forma que hoy muchas universidades están reportando un número cada vez más creciente de egresados que se emplea en empresas o termina realizando actividades laborales muy distintas a las inherentes a su formación universitaria.
Educación Globalizada

Esto me lleva a dos conjeturas y son: que las personas van requerir formación continua a los largo de su vida laboral, porque de lo contrario no van a poder seguir el ritmo del avance tecnológico de la sociedad o de las actividades que realizan. Esto puede llevar a que las colegiaturas o certificaciones profesionales sean otorgadas de forma temporal y no permanentes, de manera que la persona deberá siempre acreditar que sigue adquiriendo conocimientos,  destrezas y herramientas que la mantienen actualizada en su área; la otra es que se desdibujen muchas fronteras entre las distintas profesiones, de manera que, las personas para ser exitosas, requerirán no solo del conocimiento de las materias inherentes a su oficio, sino que tendrán que disponer de un número cada vez más creciente de herramientas o habilidades, en su mayoría instrumentales, psicológicas y relacionales, para poder reinventarse continuamente y poder andar al ritmo de los tiempos. Esto se puede ver agravado porque las diferencias generacionales van a ser mucho más grandes, con el aliciente de que las sociedades van a tender a envejecer, en promedio, cada vez más.

Uno de los aspectos que puedo intuir es que se va a redefinir el término “analfabetismo”, porque se tendrá en el futuro como analfabeta a la persona que carezca de las herramientas necesarias para realizar un trabajo determinado,  la que no sea capaz de utilizar los equipos de alta tecnología o que no cuente con los idiomas requeridos para una efectiva comunicación, entre otras cosas.    

Suelo decir que el que no avanza, retrocede, con lo cual el gran reto de este nuevo siglo es tener la capacidad y la determinación de mantenerse al ritmo de los tiempos y no quedar rezagado en el pasado.